Amolda tus zapatos con estos trucos caseros para que los zapatos te queden fácilmente, sean más cómodos al caminar y no te produzcan dolores o en el peor de los casos, no se te formen terribles ampollas en los pies.
Truco 1:
Necesitarás unas medias gruesas y un secador de pelo.
Pasos a seguir:
Ponte un par de medias que sean más gruesas de las que usas normalmente y colócate los zapatos que necesitas amoldar. Luego prende el secador de pelo a la temperatura máxima de calor y comienza a darle vuelta por todo el zapato durante 10 minutos. Transcurrido el tiempo, lo retiras e inmediatamente debes intentar correr, caminar o saltar para obtener mejores resultados.
Truco 2:
Necesitas unas bolsas y agua.
Pasos a seguir:
Llena dos bolsas plásticas que estén bien selladas con agua y cierras con un nudo, cada una. Luego pon una bolsa llena en cada zapato y luego mete los zapatos en una bolsa limpia, llévalos al congelador por 3 o 4 horas. Sácalos del refrigerador, espera un rato que se les pase el frío y listo los zapatos estarán más estirados y suaves para usar. Antes de realizar este procedimiento debes revisar que tu calzado sea a prueba de agua.
Recomendaciones: Estira los zapatos para arriba y para abajo, varias veces, después de cada procedimiento. En algunas ocasiones necesitarás repetir varias veces cualesquiera de los dos procedimientos para que el calzado vaya estirándose mes poco a poco.