Gracias a los avances tecnológicos tu hogar, podría llegar a ser tu centro de estética particular, lo cual genera un impacto principal en tu bolsillo, ya que sería mucho más económico que acudir a un spa o un consultorio dermatológico para arreglar aspectos de tu imagen que te incomodan.
1. Tu secador de pelo compartirá el baño con cosas que únicamente se encuentran en consultorios dermatológicos.
2. Podrás comprar tu propio Gentle Waves.
3. Tratamientos semanales con luz amarilla pulsada desde el dispositivo estimulador de colágeno en tu hogar.
4. Podría existir un dispositivo de uso múltiple que ofrece radiofrecuencia, ultrasonido, láser y luz terapias para tratar el acné, manchas solares, disminución de fibra capilar, arrugas y líneas de expresión.
Fuente: institutojacqueline.wordpress.com