Saber si una mujer es frígida o experimenta orgasmos vaginales, es una suerte inexacta. Sin embargo, de acuerdo a la Universidad Católica de Louvain, en Bélgica, la forma de caminar de las féminas, habla sobre el comportamiento en la intimidad.
Los autores indican que los orgasmos producen grandes beneficios a nivel mental, de autoestima y fisiológicos. Entre estos, destaca la relajación de algunos músculos de las piernas, debido al coito. Esto hace que la forma de caminar se vea afectada.
El andar libre, relajado y sin músculos bloqueados, es la característica de las féminas que si experimentan a plenitud los orgasmos, lo cual hace que cuando caminen sean más sexys.
Partiendo de esta teoría, los científicos observaron a un grupo de mujeres caminando por la calle, para luego realizarles una entrevista. Con un 81% de efectividad, se pudo predecir si estas vivían intensamente su sexualidad.